21 nov 2014

Una solución a la altura


Axelrod y Halffter
Tras meses de incomprensible incertidumbre, decisiones postergadas, presiones ilógicas e interferencias  todo parecía indicar que el desenlace iba a estar a la altura del chusco enredo. No ha sido así. Pese a la confluencia en los despachos de administraciones de diferente color político la cordura ha prevalecido sobre el dislate y, entre todos, han alumbrado una salomónica resolución, no por inesperada, menos acertada. Se podría haber optado por otros caminos, pero el sendero inaugurado, sobre el papel, nos parece abiertamente positivo para el buen desenvolvimiento del Maestranza y la Sinfónica de Sevilla. El escenario nos recordará al de hace una década, con una doble dirección, pero los actores son otros y el momento artístico del coliseo del Paseo Colón también es diez años mejor. Hemos coincidido en numerosas ocasiones con el maestro Pedro Halffter en la creencia de que su proyecto operístico para la ciudad no estaba agotado. Durante dos años más, como mínimo, podrá continuar demostrándolo. Confiamos en que retome el pulso de sus primeras temporadas, con apuestas de mayor compromiso estético de las evidenciadas en los últimos cursos. En todo caso, el madrileño ha dado una incontestable proyección internacional al Maestranza, lo que se le agradece volviendo a confiar en él. A su lado, John Axelrod dirigirá la Sinfónica. Será el quinto director titular en su historia. En medio del emponzoñado panorama de los últimos meses resulta hasta higiénico que se opte por un nombre nuevo y que, prejuzgamos, no está lejos de Halffter en sus ambiciones programativas. El americano era, junto con Marc Soustrot, el candidato idóneo para suceder al madrileño. Y su probada solvencia puede llevar lejos a la Sinfónica. Además presume de ser un buen y cordial entrenador, algo necesario ante tan buen y difícil equipo de virtuosos.

Publicado originalmente en la edición papel de El Correo de Andalucía el 20 de noviembre de 2014.