21 may 2019

Bryn Harrison:"Busco que la escucha se convierta en algo perceptivamente transformador"

Bryn Harrison.
Dentro de no demasiado tiempo el nombre de Bryn Harrison (1969, Bolton, Inglaterra) se enarbolará cuando de lo que se trate sea de poner en valor la música contemporánea británica. Profesor de Composición en la Universidad de Huddersfield, y ligado al célebre festival de nueva música que allí se celebra, su obra transita un sendero distinto de la conflictividad estructural y/o posmodernista de señeros creadores de las islas como Peter Maxwell-Davies, Harrison Birtwistle o Brian Ferneyhough. Con Feldman como telón de fondo, Harrison ha dado luz a obras como la pianística Vessels (2012), una caudalosa y serena composición de casi 80 minutos o, más recientemente, Piano Quintet (2016), música de enrocado discurso, tan atenta a las texturas sonoras como al cincelado de unas estructuras marmóreas (y recientemente grabada en disco en el sello HCR). A su alrededor, intérpretes como Philip Tomas, el Cuarteto Bozzini y los ensembles Apartment House y Plus-Minus, entre otros, llevan años haciéndose eco de su música. Una obra, en fin, que aporta un punto de ruptura propio en él, en ocasiones, excesivamente homogéneo universo de la modernidad.

Ismael G. Cabral: Siendo un destacado compositor británico sorprende que en su biografía formativa no aparezcan dos de los más prominentes músicos de su país, Harrison Birtwistle y Brian Ferneyhough. Sin embargo, sí que tomó estudios con Gavin Bryars, más cercano a posturas minimalistas y, en todo caso, muy al margen de la academia. ¿Ha sido un posicionamiento quizás el suyo de alejarse de los cánones de la música contemporánea centroeuropea?

Bryn Harrison: No, en absoluto. Veo mi música como una síntesis del experimentalismo británico / americano y la música de vanguardia centroeuropea. Tanto Birtwistle como Ferneyhough han ejercido una profunda influencia en mi manera de componer, al igual que otros importantes compositores como Michael Finnissy, James Dillon y Aldo Clementi. Recuerdo haber leído hace años el ensayo Ritmo y duración, de Ferneyhough, que me sirvió para iluminar mi forma de componer y también para  entender, por ejemplo, todo el material musical que Morton Feldman desplegó en una obra como Clippled Symmetry. Tengo una enorme deuda con las tradiciones europeas y americanas. Al principio de mi carrera me interesé más por explorar un lenguaje rítmico complejo que podríamos asociar con Ferneyhough y Finnissy, pero unido a un enfoque más perceptivo de la tonalidad. En ese sentido creo que, para mí, un compositor como Olivier Messiaen también ha sido una gran influencia, particularmente por su uso del lenguaje modal.


3 may 2019

Vanguardia desde Canadá: Cuarteto Bozzini “Exploración y experimentación”.

Cuarteto Bozzi. / Foto: Michael Slobodian
El Cuarteto Bozzini es un conjunto fundamental en el desarrollo y la expansión de la música contemporánea para esta formación en los últimos 20 años. Una aseveración de este calibre emparenta al grupo inmediatamente con el crucial y plenamente vigente Cuarteto Arditti. Y es exactamente así. Ambos permiten mirar desde una óptica casi histórica la maduración del cuarteto de cuerdas en el último tramo del siglo XX y lo que llevamos de siglo XXI. Que hoy existan otras formaciones análogas de enorme relevancia (los Jack, Tana, Diotima…) viene a constatar la viveza de un género que nunca ha dejado de interesar a los compositores. Sin embargo, el hecho de que los Bozzini tengan su origen en Canadá no les ha permitido extender sus redes en Europa con igual facilidad que a otros colegas. Con todo, su presencia en festivales como Maerzmusik (Berlín), Ostrava Days y el Festival de Huddersfield ha sido (y es) muy relevante. El interesado en estas músicas, esté donde esté, les conoce, les admira y ha escuchado unas grabaciones que constituyen un catálogo de discos excepcional que nos deja asomarnos a creaciones de compositores auténticamente radicales y exploratorios como Phill Niblock, Ernstalbrecht Stiebler, Aldo Clementi y James Tenney, por citar solo a cuatro de ellos. A nadie asombrará que ningún programador español (todavía… ¡todavía!) haya reparado en ellos. Son inéditos en España. Sirva esta extensa conversación con la violista Stéphanie Bozzini, fundadora del grupo, como primera carta de presentación escrita en castellano. Valga, ojalá, como mensaje en una botella que alcance pronto alguna orilla cercana.

Ismael G. Cabral: ¿En qué momento se encuentra el Cuarteto Bozzini cuando se cumplen 20 años desde su creación?

Stéphanie Bozzini: Diría que estamos en un punto muy interesante porque, en los últimos años, hemos podido revisitar muchas obras que se han convertido en importantes para nosotros. Echando la vista atrás son ya bastantes los compositores que han escrito para el Cuarteto, y eso es algo fundamental para un grupo que está completamente especializado en música contemporánea. Desde que comenzamos a tocar asumimos la responsabilidad de ser mentores de nuevas generaciones de compositores e intérpretes. Y, felizmente, los resultados son cada vez más palpables.